Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

sábado, 30 de mayo de 2015

Iris, ¿estás por ahí?

Iris era la psicóloga de la AECC que durante más tiempo me trató. Al principio era Rosa, que se tragó mis primeros seis meses, pero luego fue Iris la que aguantó mis paranoias durante dos años.
Cuando ya me despedí de ella, pensando que no volvería a necesitar ayuda (me equivoqué), le presenté mi blog. No podía creer que en tanto tiempo no le hubiera dicho nada.
Iris me regañaba a menudo, pero una de las cosas que más me reprochaba era mi "obsesión" por la comida de mi familia. Siempre iba corriendo, porque tenía que pasar por el súper o ir al mercado a la pescadería o a comprar carne, o pollo.
Mi expresión es siempre la misma (es y era), "me voy que TENGO QUE ir al mercado" y ella siempre me decía que no, que no "tenía que..." que lo hacía porque quería, que no pasaba nada si no iba a la compra, que algo habría en casa para comer, que no tenía que preocuparme tanto de la comida, que tenía una verdadera obsesión.
¿Qué por qué os cuento ahora esto?, pues porque he discutido con los santos padres, los míos. Vamos a entendernos, discutir con mi padre es el pan nuestro de cada día, mi padre y yo discutimos por todo, pero nos dura el enfado lo que se tarda en decir "amén". Discutir con mi madre es otra cosa. Con ella discuto mucho menos  y nos dura más la cosa.
Pues eso, que he discutido con ellos.
Mi Sol ha seguido medio regulinchi toda la semana, sin fiebre pero con dolor de cabeza y de tripa, ayer no fue al cole y le acerqué al médico. Me dijo que no le veía nada, que sería cualquier virus sin importancia, que si le duele la tripa, que no tome leche ni lácteos, pero que si no tiene diarrea ni nauseas que coma un poco lo que le apetezca sin forzar.
Genial, pues al niño le apetecía pasta para comer, yo se la hubiera dado sin nada, simplemente cocida, pero él insistió en ponerse un poquito de bolognesa. De segundo pensé que tomase jamón de york, pero vio que había cinta de lomo y quiso un filetito a la plancha.
¡¡¡¡Ahí surgieron los rayos y truenos!!!!, que si no me preocupo de lo que comen mis hijos, que si no soy previsora y no me organizo con las comidas, que si el niño no puede comer eso que es muy fuerte (cosa con la que puedo llegar a estar de acuerdo), pero lo cierto es que mi Sol no tiene diarrea, ni nauseas, ni nada.
La verdad es que no es fácil la organización cuando en el último momento se te descabala, yo no contaba con un niño a comer, así que no había descongelado pollo, por poner un ejemplo. El pescado para hacer hervido con patatas no hace falta descongelarlo, pero si se lo presento s mi Sol para comer fijo que se pone peor del asco que le da.
Pues eso, que al niño la comida le sentó divinamente y que yo me he ganado la bronca.
Iris, tengo que presentarte a mis padres...

6 comentarios:

Opiniones incorrectas dijo...

Jajajajaja y lo cierto es que esas intromisiones y frasecitas, aunque se discuta, sólo se le permiten a los propios padres.

Yo reconozco que si alguna de las cosas que me dice mi madre me las llega a soltar otra persona, le lío la de Dios es Cristo xDDD

Besos, guapa!

Irene, Umpa Lumpa & cía dijo...

Si te sirve... durante mi rotación en pediatría una de las cosas que aprendí es que ya no se recomendaban las "dietas astringentes" en niños (incluso cuando tenían diarrea... que ni siquiera es el caso). La recomendación es: "que coman de lo que les apetezca". Si tienen diarrea, evitar cosas con mucha fibra e intentar que no haya mucho tomate frito por ahí rondando... pero había más peligro de deshidratación si se se hacía dieta astringente que no haciéndola. Básciamente porque hay que tomar una sola vez arroz blanco a la nada y pescado hervido, para saber que para eso... "mejor nada". Y los niños dejaban de comer. No porque les sentara mal... sino porque esas comidas son un crimen contra la infancia (y contra la humanidad, diría yo... jajaja)

En fin... espero que se recupere pronto del todo. Y que haya relajación con la comida. (Tendrías que ver mi frigorífico... y aún así, cuando lo veo.. pienso que rebañando me da para comer una seamana... jaja Y a las malas... siempre hay leche con cola cao. Que a eso no le hago nunca feos... jaja =) )

MATT dijo...

Ay las madres!, qué haríamos sin ellas pero qué intensas son... Ya te conté de la mía, así que sabes que te entiendo.
Te iba a comentar lo que ya te ha dicho Irene, ahora dicen que es mejor que coman normal. Mi hijo acaba de estar como tu Sol, cinco días le ha durado.
Un beso

Sara M. dijo...

Es que es lo que yo he hecho siempre. Mientras no haya diarreas o vómitos, se come lo que apetece. Mi hija además tiene una curiosa forma de dolor de cabeza: dura unas horas, y termina vomitando. Pero al cabo de media hora es capaz de comerse unas migas, o lo que se le plante. Ni idea de porqué, cada uno somos un mundo.
Espero que tu casi peque ya esté mejor, que aunque no sean graves, los dolores de barriga son un rollo.

Alejandra dijo...

Yo misma he pasado lo de tu sol
Iba todo el día con sensación de fiebre pero sin ella, con la cabeza cargada a ratos y con dolor los más, y muchos retortijones. Lo mismo que vino se fue a la semana. A todo lo que ignoran le llaman virus . pues serán virus. Se es como se es y con los hijos más. Soy súper mega hiper protectora con mis hijos pero soy así aunque luche. Y eso , que quien me quiere lo sabe y me acepta. Y creo que no pasa nada.Mis hijos son geniales a pesar de mis millones de defectos...Mil besos!

Anónimo dijo...

Pues no sé si te va a consolar pero yo desde que te conozco siempre he pensado lo buena cocinera que eres y lo organizada. Incluso he intentado copiar tus recetas ....mis hijos me preguntaban qué mosca me había picado!😉