Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

martes, 6 de mayo de 2008

¿Para qué sirvo?

Madre mía que puente, uf.
Empezamos mal, con un atasco de salida que te puedes morir, menos mal que los niños son unos benditos y se durmieron, porque llegamos a Benidorm a las 2 de la mañana.
Pero eso fue sólo el principio. Suena bonito, idílico, cuatro días para nosotros solitos, la familia Trap y ni uno más, no más abuelos, no más tios, no más intromisiones... Pero todo tiene un pero. Los niños son muy pequeños, hay que mantener más o menos sus horarios y rutinas y aunque mi contrario ayuda y mucho, la que lleva el peso de la casa soy yo, y por eso soy una pesada. Me parece que he ido arrastrándome durante los 4 días, sin pararme a disfrutar sino algunos pequeños momentos, justo antes de empezar a correr de nuevo.
Él me dice que soy una agonías, que no puedo ser tan estricta, pero es que no sé ser de otra manera, y doy fe de que de veras lo intento, pero no me sale.
Además, como siempre que salimos, los niños se ponen malos y hay que ir al médico, esta vez han sido anginas, bueno, cosas de niños.
El caso es que no puedo dejar de preguntarme para qué sirvo. Estos días me he sentido fracasada como madre, había veces que echaba de menos no ser un pulpo para tener más manos y también fracasada como amante-compañera, porque terminaba el día tan agotada que para pocas fiestas estaba.
Menos mal que hoy hemos vuelto a la rutina, me siento afortunada de haber podido disfrutar de mi familia, pero tengo mucho que aprender y que cambiar en mi forma de ser o volveré a tener úlcera de estómago.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

A veces también he pensado yo para qué salir, pero estoy segura que esos momentos pequeños, han sido deliciosos. ESos paseos mirando los cactus, ese mar y ese horizonte, y esa soledad de vosotros 5. eres una gran madre,...sino, no habrías escrito este post. ¡¡Qué suerte tienen tus principes!

Lamardestrellas dijo...

¿De verdad te preguntas para qué sirves? ¡Pues si tú misma te contestas en este relato! Para llevar la casa y la rutina en un orden que tus hijos necesitan, para identificar que tienen anginas y llevarles a tiempo al médico, para disfrutar de los pequeños ratitos que tus múltiples labores te permiten y así compartirlos con tu familia, para tumbarte al final del día, derrengada, junto a tu marido, y darle un beso en la punta de la nariz que le haga sentir que, a pesar y por encima de todo, le quieres. Para todo eso y muchísimo más. Porque encima de ser una madre y una esposa ejemplar, ¡tienes tiempo para leer los rollos de tus amigas, doy fe! Besotes, pulpo multitarea.